¡Hala!

Ya lo he dicho.

Las oposiciones no son la única salida ni la mejor necesariamente.

Y lo que tengo muy claro es que no son para mí.

No lo descarto de manera definitiva, pero por el momento no me interesan.

Avenida del Libertador (Buenos Aires, Argentina)

Sé que mi postura respecto a opositar o ser funcionario es poco frecuente en España y por ese motivo me he animado a compartirla contigo.

De esta manera además, puedes conocerme un poco mejor, saber cómo pienso y a qué me estoy dedicando.

1. Momentos

Cuando terminé la carrera universitaria mucha gente me insistía en la idea de que estudiara oposiciones para ser arquitecto municipal, arquitecto del Estado o en general para cualquier puesto de funcionario relacionado con mis estudios.

Pero ese no era mi momento.

Tenía 24 años y muchas ganas de probar otros lugares.

Quería probar a vivir y trabajar en una gran ciudad, conocer sus costumbres, su ritmo de vida, de tal manera que pudiera descubrir algo más allá de lo que había vivido siempre.

Además ya había tenido la experiencia de trabajar como becario en un ayuntamiento y la idea no me entusiasmaba.

Años más tarde, una vez que hube satisfecho mis deseos de trabajar en diferentes ciudades (Madrid, Ámsterdam, Basilea) y estudios de arquitectura, descubrí el mundillo de los negocios online y no lo dudé un segundo: empecé a montar este blog y otros negocios por internet y nuevamente mucha gente volvió a plantearme si no era mejor opción estudiar unas oposiciones, en este caso para ser profesor de dibujo técnico en un instituto de secundaria.

Ciertamente la idea puede parecer buena a priori porque parece razonable asegurarte un buen sueldo fijo a final de mes y, una vez que tengas eso afianzado, entonces puedes empezar a dedicarte a otras cosas más atrevidas, alocadas e inciertas, quizá más relacionadas con lo que a ti te gusta o te apetece.

Pero ese tampoco era mi momento.

Tenía 32 años y quería abandonar el trabajo de oficina para viajar por el mundo libremente, sin ataduras ni horarios.

Conseguí hacer que los negocios por internet funcionaran.

Desde hace 3 años vivo exclusivamente de lo que generan mis páginas web.

Ahora tengo 36 años y estoy encantado con la libertad de movimiento y horarios que tengo.

Así que por supuesto este tampoco es mi momento para hacer unas oposiciones.

Porque al final, todo tiene su precio y, tanto si estudias para funcionario, como si buscas un trabajo de empleado o montas tu propio negocio, vas a tener que enfrentarte a las consecuencias de tus decisiones.

2. ¿Cuáles son las consecuencias de estudiar unas oposiciones?

¿Qué supone estudiar unas oposiciones?

En el mejor de los casos:

2.1. Conseguirás un puesto de trabajo para toda la vida

Recibirás tu sueldo pagado regularmente a final de mes y tus 2 pagas extras anuales.

Sin faltas, sin retrasos y de manera puntual.

Eso está muy bien y supongo que es el sueño deseado por la mayoría:

«Por fin, un trabajo para toda la vida, como con Nescafé«

Pero para mí existen grandes desventajas.

Yo, personalmente, no me imagino yendo toda la vida al mismo lugar de trabajo, teniendo que hacer las mismas tareas una y otra vez, un año tras otro, sin más ambición que simplemente dejar pasar los días y las horas en el trabajo.

Un días tras otro.

Un año detrás de otro.

Así durante el resto de tu vida.

Realmente a mí me suena como una condena.

Sé que lo estoy exagerando un poco (o bastante).

Pero yo realmente lo siento así y he llegado a la conclusión de que es algo depende de la personalidad de cada uno.

Desde mi punto de vista, tener un trabajo fijo de funcionario:

  1. Te ata a un lugar, que puede ser el que tú deseas o no.
  2. Te ata a un horario, que normalmente es bueno, pero suele ser inamovible.
  3. Te ata a unas reglas impuestas, a unos jefes y a unos compañeros

Todo esto es considerando el caso bueno, es decir, el caso de que estudies las oposiciones, las apruebes y obtengas una plaza.

Pero quizá no sale todo como esperabas.

Porque en el peor de los casos:

2.2. Habrás destinado 2 años a estudiar algo que te gusta

Cuando alguien decide estudiar unas oposiciones, lógicamente se pone en el caso favorable de que termine aprobándolas y consiguiendo una plaza.

Pero esto no es así siempre y hay que tener en cuenta las consecuencias.

  • Existe la posibilidad de que no se convoquen oposiciones en muchos años y que tú estés estudiando sin saber realmente cuándo se van a convocar.
  • También existe la posibilidad de que no apruebes, en cuyo caso puedes seguir intentándolo otros 2 años más o desistir. ¿Hasta cuándo? Eso ya depende de ti, tu paciencia y cómo estés costeando tus gastos.
  • O puede que apruebes pero no consigas plaza. En este último caso, con suerte puedes conseguir una interinidad, con lo que estarás a expensas de las plazas que vayan quedando vacantes, en cuyo caso deberás estar pendiente del teléfono para ver a dónde te tienes que mudar al día siguiente.

Como ves, no todo es de color de rosa.

Todo tiene consecuencias e incertidumbres inherentes.

3. Cuestión de estilos de vida

En mi opinión lo importante es saber qué estilo de vida quieres llevar y qué estás dispuesto a sacrificar para conseguirlo.

Aprobar unas oposiciones y ser funcionario es una magnífica opción si te apetece estabilizarte en un sitio y llevar una vida calmada sin grandes altibajos.

Pero eso no es para todo el mundo, o al menos no es para mí.

Porque yo soy más cambiante, me gusta moverme, probar cosas nuevas. En cierto modo me gusta tomar riesgos, lanzarme a la aventura, siempre que eso venga guiado por un deseo, un impulso interno.

Ese ha sido mi estilo de vida y me ha permitido:

  • Tener 3 trabajos de arquitecto (Intecsa-InarsaSeARCH y NW) en 3 países diferentes durante 7 años.
  • Desarrollar 6 negocios online diferentes durante los últimos 4 años hasta dar con la tecla de cuáles me funcionan mejor. Durante ese tiempo he vivido en 3 ciudades diferentes dentro de España (Sabadell, Barcelona, Jaén)
  • Viajar cuando me apetece y donde me apetece: en los últimos 2 años he estado 1 mes en Tailandia, 1 mes en Grecia y Bulgaria, 1 semana en Andorra, varias veces en Sevilla, Granada, Almería y Madrid y ahora mismo estoy escribiendo desde Argentina.
  • Trabajar cuándo y dónde quiero, sin horarios ni jefes

Todo es una motivación brutal para mí; es combustible para mi alma y alimento para mi cerebro, un aliciente para levantarme entusiasmado cada mañana.

4. Conclusión

Cada persona tiene que encontrar aquello que le motiva, aquello que le llama desde dentro y que más resuena consigo misma.

Si te gusta un trabajo de funcionario en concreto o simplemente te gusta el estilo de vida que ello te ofrece, ¡adelante!

Es una opción excelente y estoy convencido de que los años de sacrificio estudiando oposiciones merecen la pena. De hecho yo admiro y envidio a la gente que es capaz de disfrutar de ese tipo de vida, porque es muy cómodo. Al menos yo lo veo más cómodo que la forma de vida que yo he llevado en los últimos años, con mudanzas cada 1 o 2 años por toda Europa.

Pero tengo que reconocer que ese estilo va más conmigo y yo no estoy hecho para ser funcionario.

Al menos por ahora.

Compartiendo estas reflexiones mías simplemente quería mostrarte que opositar no es la única opción ni la mejor, sino una más, que es más apta para un determinado tipo de personalidades.

Por mi parte prefiero seguir dedicándome a mis negocios online, seguir trabajando en este blog y creando libros y vídeo cursos de gran calidad sobre dibujo técnico que ayuden a la gente a sacar un 10 en selectividad 🙂

En cualquier caso lo que sí te recomiendo es que te formes bien.

Porque tanto para oposiciones como para cualquier otro empleo, tener una buena formación es esencial, es uno de los pilares básicos en los que deberías invertir.

Espero estar aportando con este blog mi granito de arena en este sentido.


Antes de despedirme me gustaría dejarte una reflexión de Antonio Banderas que va en la misma línea de lo que he comentado.

Y por supuesto, espero tu opinión en la sección de comentarios.


La imagen del principio es de una bonita avenida en Buenos Aires, la Avenida del Libertador, muy ancha y con unos árboles enormes.

He disfrutado durante 3 días de Buenos Aires y acabo de llegar a Córdoba (Argentina). Ya sabes, si andas por aquí, pégame un toque y nos tomamos un café.

14 Comments

  1. Manuel Cantero Montesinos Reply

    Todos tomamos decisiones, lo difícil es vivir con ellas, y ahí nadie puede ayudarnos. (El ladrón de palabras)

  2. Está muy bien que digas que ser funcionario es para determinadas personalidades y que tú no encajas, pero lo dejas algo abierto, al decir: «de momento».
    Efectivamente todo tiene su lado positivo y el menos positivo. Me gusta este post, a veces tenemos que justificarnos de nuestros objetivos que a terceros les parecen algo loco. yo desde luego, aprendo mucho de tus post y me encanta acudir a tu blog.

    • Gracias Jorge,
      Por mi parte no me gusta ser tajante en las afiramaciones. Si digo que no es para mí, no lo es por ahora. Pero no sé cómo pensaré de aquí a 2 años o a 2 semanas.
      Un saludo y gracias por compartir tu opinión

  3. Algo no es como cuentas.
    El funcionariado no tiene por qué atarte a una lugar fijo. Existen los traslados.
    Personalmente yo llevo ya cinco destinos distintos.
    Saludos

    • Hola Ángel,
      Gracias por la anotación y estoy totalmente de acuerdo contigo. Se puede jugar con eso si quieres la movilidad.
      Un saludo

  4. Hola Pablo, estoy muy de acuerdo con esta entrada de tu blog, sinceramente de las más interesantes. Llevo unos meses ojeando tus publicaciones debido al compromiso de reenganchar con el dibujo técnico después de casi diez años de examinarme de las últimas opos convocadas en Madrid de dibujo. Siendo está mi asignatura maldita en Bellas artes….no encuentro el momento de hacer las paces con ella. Pero la vida es así de caprichosa….que después de una década de desaparecer del mapa laboral, viviendo de freelance como he podido, con mis trabajos artísticos…con pintura mural…escultura y artesanías variadas, apareció no menos q un año una llamada del ministerio de educación….buscando profesores de una lista congelada en diez años. No sé si suerte o desgracia….pero escuchando el link de Antonio banderas, es una pena que este país no anime más a emprendedores por igual que a trabajadores del estado, por que yo me sumo a la idea…de que hay que valer para aguantar la rutina del funcionario, la q llevo ahora, por cierto, con muchas lagunas y dificultades( que ser profesor no es hauha)…..y sacrificar la creatividad que tenía anteriormente. Sólo decir que ánimo a aquellos que estéis luchándo…yo lo luché y ahora estoy valorando si es mi verdadero camino.
    Saludos a todos y muy bueno el blog….algo estoy intentando recordar

    • Irene, muchas gracias por compartir tu opinión. Sin duda parece que tú estás completamente metida en el ajo. Todo son etapas, ánimo con esta y espero que el blog te siga ayudando.

      Como dices, no hay ayuda al emprendimiento en España. Me encuentro ahora mismo viajando por Argentina y todos los arquitectos jóvenes (menores de 40) tienen su propio estudio de arquitectura, la mayoría asociados con compañeros de su promoción. Por lo que yo conozco, eso es casi impensable en España, algo falla por ahí.

      Por otro lado, he estado ojeando tu blog y me encanta tu (vuestro?) trabajo. Supercreativo. Enhorabuena!!

      Dejo el link por aquí para que los lectores le echen un vistazo

      http://brotesartisticos.blogspot.com/?m=1

  5. Hola Pablo, contesto tarde… pero contesto!

    Felicidades de nuevo por tu blog (no me parecerán nuca suficientes)… Pero respecto a este artículo me gustaría aportar mi punto de vista.

    Soy arquitecta como tú, y tengo un máster en Investigación en Arte y Creación. Tuve la oportunidad de irme a trabajar fuera de España cuando acabé la carrera, de hecho, mi primo que acabó antes que yo está en un estudio de Londres (bueno ha cambiado de estudio unas cuantas veces en función de lo que le van aportando u ofreciendo), también tengo amigos de mi promoción que trabajan en Alemania y más repartidos por el mundo, con esto quiero decir que me hago a la idea de lo que es eso. Por otro lado también tuve la «fácil» posibilidad de montar un pequeño estudio en mi ciudad (digo la «fácil» porque mi familia tiene una empresa relacionada con el sector de la construcción y podría haber recibido un empujón).

    Pero pese a que la carrera me encantó (no la cambio por nada) había algo en esa vida laboral que no me convencía, no quería estar en un estudio gigante metiendo millones de horas y trabajando en proyectos que no son míos, y por otro lado, mi ciudad se me quedaba pequeña, conozco de primera mano el trato con albañiles y clientes (mi tío es arquitecto allí y he podido «meter un poco el morro para husmear») y le veo cansado, con mil líos, siempre intentando que el cliente no se queje mucho, que no haya problemas, que el arquitecto municipal no de mucho la lata… reuniones, conflictos, quedar bien…

    En casa he tenido las figuras de un empresario y de una profesora, mi madre, y a ella, que ya no está conmigo aunque siempre la llevo dentro, nunca la oí quejarse de su trabajo, nunca hubiera decidido dejarlo por voluntad propia (era médico y se dedicaba a la enseñanza en FP), siempre tenía anécdotas de los alumnos, los compañeros… ponía el corazón en su trabajo y la adoraban.

    De mi paso por la secundaria he de resaltar que siempre me quejé de las clases de plástica y música. ¿¿Cómo puede ser que me encante la música (toco el saxo y el violín), que me encante pintar y experimentar plásticamente (antes de andar descubrí la pintura con mi madre, hacíamos cuadros abstractos con pintura de dedos y muchas otras cosas…) y que en el instituto esas asignaturas me parezcan un PUTO BODRIO??!!! UN PUTO BODRIO CON MAYÚSCULAS porque no hay otra forma de definirlo… algo estamos haciendo mal.

    El año siguiente al acabar la carrera cursé el máster de profesorado, no tenía claro si sería lo mío pero como le había dado vueltas desde 3º pensé que si lo hacía nada más acabar pues hecho estaba. Hice las prácticas en el instituto de mi ciudad, pequeña, solo hay uno, el mismo al que fui yo. Daba la casualidad de que el actual director fue mi antiguo profesor de dibujo técnico en bachiller, por lo que me sentí como en casa. De él tengo que decir que es cojonudo en lo suyo, ya que consiguió que dibujo se convirtiese en mi asignatura favorita =) pero también que le falta un poco de nuevo aire, de modernidad, de sXIX… Aparte de con él, también acudía a las clases de la ESO con otra profesora, ella era de Bellas Artes, agradable pero frustrada, estaba allí pero hubiera preferido otra vida. Me acuerdo en especial de 4º de diversificación (donde en teoría están los estudiantes que necesitan un empujón para acabar la ESO) pero donde yo vi una realidad totalmente distinta. Algunos si, necesitaban apoyo, pero otros eran chicos que no tenían hábitos de estudio porque en sus casas, estudiar, no era lo primordial para sus padres. Chicos que no veían las posibilidades que la vida puede ofrecerte y lo importante que es lucharte el futuro que quieras conseguir tú. Chicos predestinados a no cursar bachiller, no porque no tuvieran capacidades para ello, sino porque nade les había dado OPORTUNIDAD para ello. Por cierto, las clases de plástica seguían siendo un bodrio…

    Ahora estoy trabajando en un colegio concertado, llevo poco, es mi primer año. En el colegio flipan con las iniciativas que tengo en plástica, y nunca se me ocurrirá valorar con una nota inferior a 10 el trabajo plástico/artístico de un alumno o alumna que se haya esforzado en el y haya despertado su creatividad personal, porque muchos de mis alumnas lo primero que decían es “yo no se dibujar” Y ESO NO PUEDE SER!!!! Todo el mundo sabe dibujar, el dibujo es una herramienta para la vida y eso es lo que en mi opinión, tiene que transmitir un profesor de plástica. Y con mis alumnos de bachiller… no puedo pasármelo mejor en clase. No voy a negar que es duro a veces, que te buscan las cosquillas y que no es un trabajo fácil, pero todos ellos tienen algo, y los casos que más me atrapan son los de aquellos a los que tachan de “conflictivos” ¿conflictivos???? Conflictos tienen ellos y por eso actúan como actúan. Aquellos que necesitan un empujón, pero no para aprobar, sino para darse cuenta de que valen mucho y que tienen que encontrar las ganas para peleárselo.

    Por todo ello quiero opositar, POR SUPUESTO QUE QUIERO OPOSITAR! Porque en un concertado/privado estás con alumnos que tienen detrás cierto colchón, y los profesores apoyan y ayudan más, en el fondo es una empresa que aprieta a los que están allí para que funcionen, los padres piden tutorías y el profesorado responde. Pero en un público estás en contacto con todas las realidades, padres que no se preocupan, profesores que dan sus horas y se van, horas de tutoría totalmente desperdiciadas… y es allí donde creo que necesitan mi trabajo. Me enamoré de aquel grupo de alumnos de 4º de mis prácticas, y voy a seguir luchando e implicándome con todos aquellos que, por su situación, no tienen la suerte que hemos tenido otros.

    Por lo que me fastidia cuando se habla de opositar a la enseñanza como un trabajo fijo (en mi opinión bastante mal pagado en este país por cierto). Porque la enseñanza no necesita gente que se ha cansado de perseguir sus sueños y quiere algo estable, la enseñanza necesita gente motivada e implicada que le ponga a su trabajo toda su CREATIVIDAD y CORAZÓN.

    • Hola Julia,
      Muchísimas gracias por compartir tu experiencia. Me parece totalmente lógico lo que comentas y te animo a que encuentres ese hueco que estás buscando en la enseñanza pública: es necesario que haya gente que ame su trabajo de esa manera, especialmente en la docencia, que es tan importante para el desarrollo de las personas y las sociedades. Enhorabuena por esa actitud tuya
      Me alegro de verte por el blog 😉
      Un abrazo

  6. Hola Pablo, tengo actualmente 24 años y me gradué el año pasado en Derecho y ADE. No eres el único que ha decidio no opositar a pesar de que es el consejo que la mayoría de esta sociedad repite una y otra vez (aún sin conocer las inquietudes de cada uno) y lo que está socialmente aceptado. Además soy de Extremadura donde lo que he dicho anteriormente se multiplica por tres, ya que el sector privado es reducido y casi siempre relacionado con la ganadería o agricultura.

    Bueno, para empezar, decir que por supuesto, esa cultura va a llevar a que no avancemos como sociedad, tal y como expresa en ese vídeo Antonio Banderas. Pero más allá de un sentido de solidaridad global y preocupación por el país en general, sin duda he de darle la razón al que oposita. El sistema español esta configurado de tal forma que un funcionario público tendrá (salvo ciertos casos) la mitad o menos de preocupaciones que alguien dedicado al sector privado. Prácticamente son intocables, aunque realicen mal su trabajo, cuestión que erradicaría sin duda.
    Creo que la oposición todo ciudadano debería plantearsela si, por vocación, no hay otra manera de trabajar en lo que uno desea. No deberían existir los privilegios que ostentan, a mi parecer da lugar a una división de clases casi feudal.

    Por último, darte ánimos en todo lo que te propongas y espero que tu vida profesional sea lo más satisfactoria posible.

    Un saludo.

  7. Estimado Pablo,
    Sigo tu trabajo y me parece muy interesante.
    Soy profesora de secundaria de Dibujo con más de 25 años de experiencia, primero en colegio privado, luego concertado, después como interina y más tarde como funcionaria de carrera. He trabajado en cerca de quince centros por toda laComunidad de Madrid, en pequeños pueblos, en centros de difícil desempeño, en barrios con buen nivel económico… en fin, en muchos lugares diferentes que me han permitido conocer la realidad social de nuestra educación. Me sorprenden tus palabras que muestran un gran desconocimiento a lo que significa ser profesor de la enseñanza pública y la gran responsabilidad que conlleva y que va mucho más allá de tener unos conocimientos teóricos que tienes que demostrar en unas oposiciones . Los profesores de Dibujo, cada especialidad es diferente y en cada comunidad Autónoma también, hemos superado unas oposiciones muy duras, y no pienses que nuestros conocimientos se reducen al temario; te sorprendería la gran cantidad de trabajos, viajes, Master, doctorado, becas, curriculum…que tenemos .
    En esta sociedad ultraliberal hemos olvidado el concepto de funcionario público, hasta los políticos lo utilizan para insultar, pero el funcionariado está formado por profesores, médicos, bomberos, etc… comprometidos con el bien común.
    Todo el mundo puede optar a las plazas, pero hay que estudiar mucho y prepararse para una carrera de fondo que no acaba cuando apruebas el examen, ni cuando apruebas tus oposiciones, ni siquiera cuando te nombran funcionario de carrera. No acaba nunca porque nuestro trabajo es día a día, trabajamos con personas, alumnos, cada día , cada año y cada curso son diferentes, la sociedad evoluciona y la educación con ella por lo que continuamente adaptamos la enseñanza al nuevo paisaje. Realizamos un gran esfuerzo que conlleva mucha ilusión y creatividad. También tenemos momentos de bajón, sobre todo cuando la sociedad, los políticos, los padres.. menosprecian nuestro trabajo, olvidando que todos hemos pasado por la escuela y que gran parte de lo que somos se lo debemos a profesores que durante toda su vida intentaron hacer las nuestras mejores.
    Espero que tengas la oportunidad de conocer de primera mano lo que significa se profesor de Secundaria y también ser funcionario para que puedas ampliar esa visión tan reducida que tienes sobre este tema.
    Yo te agradezco mucho el trabajo que realizas. Muchas gracias

    • Hola Isabel,
      Mi intención con este artículo nunca fue menospreciar la labor ni los conocimientos de los funcionarios. Mi hermano es funcionario y profesor de secundaria, mi hermana y mi cuñado son funcionarios, mi padre lo fue durante muchos años, y por supuesto merecen mi mayor respeto. En este artículo quería hablar de estilos de vida y mostrar que el hecho de ser funcionario conlleva un estilo de vida determinado que, para mí, en el momento de escribirlo, no iba conmigo. Por ahora sigue sin apetecerme. Eso no significa que no admire el trabajo de los profesionales.
      Muchas gracias por tu comentario y por animar la conversación.
      Un saludo

  8. Sonia Monfort Gozalbo Reply

    Hola!
    Aunque un poco tardío mi comentario, encuentro el post muy acertado. Yo estoy tratando de buscar la inspiración y la motivación y más ahora con la que nos viene encima con el nuevo decreto de acceso a la función pública. Ojeando por web, parece que está mal que opines que estás cansada de un proceso que decir duro es quedarse corto. Ir a «muerte» no te garantiza nada. Yo he visto gente sacar dieces un año en la opo y quedarse a puertas tras el concurso y en la siguiente convocatoria no aprobar siquiera la opo. Gente dedicada exclusivamente a eso… Si eres joven, pues supongo que vale la pena sacrificarse algo, pero hay que limitar el sacrificio sino al final no tienes ni vida, ni amigos y con una edad ni familia.
    Me alegra haber leído este enfoque más libre y más en mi línea. Yo también he viajado aunque no tanto estoy buscando el coraje para comenzar otros proyectos distintos a opos.
    Enhorabuena por aportar algo distinto!!!

Write A Comment

Responsable: Pablo Domingo Montesinos Finalidad: gestionar los comentarios. Legitimación: tu consentimiento. Destinatarios: los datos que me facilitas estarán ubicados en los servidores de Webempresa (proveedor de hosting de esta web) dentro de la UE. Ver política de privacidad de Webempresa. (https://www.webempresa.com/aviso-legal.html). Derechos: podrás ejercer tus derechos, entre otros, a acceder, rectificar, limitar y suprimir tus datos en pdmontesinos30@gmail.com así como el derecho a presentar una reclamación ante una autoridad de control. Puedes consultar la información adicional y detallada sobre Protección de Datos en mi política de privacidad